Desde el miércoles 16 de febrero se ha instalado en el Molar la nueva dotación de contenedores para la recogida de aceite doméstico y ropa usada. A la inauguración asistieron la alcaldesa del municipio, Yolanda Sanz y el Concejal de Obras Públicas e Infraestructuras, Ángel Díaz Galán.
La nueva concesionaria es EastWest S.L., www.eastwest.es, empresa andaluza con una amplia trayectoria en la gestión de residuos textiles que ha ampliado su mercado con la recogida del aceite doméstico. Cuenta con las debidas acreditaciones de la Comunidad de Madrid, así como diversas acreditaciones internacionales de calidad y gestión ambiental.
El cambio de empresa tiene, además, la ventaja de unificar los servicios de recogida en una única gestora lo que facilitará la gestión y se espera revierta en una mejor calidad del servicio.
Los nuevos contenedores se mantendrán en las mismas ubicaciones que los antiguos para facilitar la transición a todos los vecinos y se instalarán dos nuevos puntos en la Urbanización Vistasierra que carecía de ellos. (Rosaleda 49: contenedor de ropa, Rosaleda 27: contenedor de aceite).
¿Qué se hace con la ropa usada que recogen?
Según estimaciones del Ministerio de Medio Ambiente, más de 300.000 toneladas de ropa usada acaban cada año en la basura o en los contenedores de reciclado. Una cifra que ya representa el 4 por ciento del total de los desechos que tienen origen doméstico y que puede ser reutilizada o reciclada en un 95%. No se debe tirar la ropa usada a la basura ya que supone tirar una materia prima y contaminar de forma innecesaria.
Con la ropa reciclada, entre un 40-50% se destina a la reutilización, tras su selección e higienización mediante su venta en la tienda de la entidad o se exporta a países en vías de desarrollo para su reutilización.
La ropa que no se puede reutilizar por estar en mal estado, se recicla. Aunque solo un 1% se recicla en nuevas prendas, si se pueden usar como tejidos de relleno en múltiples usos, sobre todo las prendas de lana y algodón.
Por último, para aquellos residuos textiles que no pueden ser reutilizados por estar sucios o contaminados se envían a vertedero o incineración.
El aceite como residuo
De acuerdo con los datos del Ministerio de Transición Ecológica, se estima que se generan unos 150 millones de litros anuales de aceite vegetal usado. Desechar este aceite, incluso en cantidades pequeñas, por fregaderos, inodoros u otros elementos de la red de saneamiento pública, es una práctica que se debe evitar ya que un solo litro de aceite puede contaminar mil litros de agua.
La acción del aceite en las tuberías implica riesgo de atascos, dificultades e incremento de costes en los procesos de depuración de aguas residuales, así como la formación de una película superficial en aguas de ríos, lagos, etc., que impide la disolución de oxígeno en el agua y mata lentamente a los seres vivos acuáticos por asfixia.
Sin embargo, el aceite usado es un excelente combustible que, debidamente tratado, puede convertirse en biodiesel para el transporte evitando la extracción y consumo de otros combustibles fósiles.
